Por ROBERTO MELENDEZ S.
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Derivado de los avances de la ciencia y tecnología, el fentanilo no sólo se ha convertido en la droga con mayor poder de intoxicación en el mundo, sino también una de las principales causas de muerte entre los adictos, como lo acredita el hecho de que en Estados Unidos más de 36 mil personas pierden la existencia anualmente. Se estima que en nuestro país la “aceptación” del tóxico va en aumento de manera “significativa”, por lo que se han “encendido las luces de alarma”.
Con una potencia de intoxicación hasta cien veces mayor que el de la heroína, el fentanilo puede considerarse como la droga sintética de mayor demanda tanto en la Unión Americana como en México, donde su decomiso se ha intensificado durante los últimos meses por parte de personal de las secretarías de la Defensa Nacional, Marina Armada de México y Seguridad y Protección Ciudadana, así como de la Fiscalía General de la República y autoridades estatales de seguridad.
De acuerdo al Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, durante 2019 el consumo del enervante ocasionó que un gran total de 36 mil 500 consumidores perdieran la vida, lo que acredita plenamente la gravedad y peligro que para la salud representa el enervante, el que comienza a tomar “carta de naturalización” en ambas naciones.
Aunque en nuestro país no existen estadísticas respecto de las “bajas” que podrían producir el uso y abuso de la citada droga, se estima que el mismo con seguridad es del orden de “cientos de víctimas”, ello con base en el fácil acceso que ahora se tiene para adquirir el “poderoso veneno”, el que podría considerarse, según el penalista Enrique Fuentes Ladrón de Guevara, como una “epidemia mortal”.
“Su pode de intoxicación es altísimo y por ello su gran demanda”, refiere Fuentes Ladrón de Guevara, mientras que criminólogos y catedráticos universitarios, entre ellos Alberto Woolrich Ortiz, destacan la “urgente necesidad” de multiplicar recursos, tanto humanos como materiales, para combatir “esa epidemia”, la que de inmediato atrapa a quienes la consumen debido a su poder de intoxicación. “Es un hecho que el fentanilo, con valor comercial inferior al de la heroína y cocaína, ha desplazado a estas últimas en la demanda por parte de esos enfermos, quienes al utilizarla exponen sus existencias, por lo que hay que ir en su rescate”.
Se estableció que en relación a 2019, el año pasado las autoridades policiales federales, militares y navales del país aumentaron el decomiso del referido opioide, como lo acredita el aseguramiento de aproximadamente tonelada y media del “producto”, además de incautar diversos precursores químicos y el desmantelamiento de m´pas de un centenar de laboratorios en los estados de México, Sonora, Sinaloa, Zacatecas, Tamaulipas, Jalisco, Michoacán y Puebla.
En la última de las citadas entidades, en operativo conjunto con autoridades de la Secretaría de la Defensa Nacional, personal de la Fiscalía General de Justicia y Secretaría de Seguridad incautaron, en la Central Camioneta de la capital poblana, un cargamento de por lo menos 42 kilos de fentanilo, con valor de varios millones de pesos, proveniente de la ciudad de Guadalajara, Jalisco. Sobre el particular, la dependencia al mando del fiscal Gilberto Higuera Bernal, en coordinación con autoridades federales, realiza una exhaustiva investigación a efecto de identificar y detener a los dueños del tóxico.